¿Por qué se rompen las relaciones de pareja?
Es cierto que no hay un único factor que provoque la ruptura de una pareja, sino que se trata más bien de un cúmulo de situaciones, pero lo que está claro es que la comunicación es la base de una buena relación.
John Gottman, psicólogo estadounidense y uno de los grandes en investigación en las relaciones de pareja, afirma que el conflicto en sí no es el problema, sino cómo nosotros lo manejamos.
Sin embargo, el conflicto sí puede llegar a ser un obstáculo cuando se caracteriza por la presencia de lo que Gottman llama “Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis”. Veamos en qué consisten estas 4 formas dañinas de comunicación:
- Las críticas destructivas
Una crítica destructiva es la que incluye descalificaciones, generalizaciones y ataques personales. Se centra en la persona y no en la situación o el problema por el que se inicia la discusión. Buscan crear culpa y malestar en la otra persona.
– Crítica destructiva: “eres un egoísta por hacer eso…”
– Crítica constructiva: “me molestó que hicieras eso porque…”
- El desprecio
De la crítica al desprecio solo hay un paso. Se trata de una falta de respeto donde los insultos, gestos, muecas, ironía o sarcasmo se emplean con frecuencia, siendo el principal fin ofender e infravalorar a la otra persona.
- La actitud defensiva
Implica no aceptar una queja y responder a la crítica contraatacando. Se buscan excusas y se niega la responsabilidad en el conflicto, culpabilizando al otro, lo que aumentará los sentimientos negativos en la pareja.
– “¿Por qué nunca quieres que vayamos a ver a mis padres?”….
– Actitud defensiva: “Porque tú tampoco quieres ir a ver a los míos”.
- El encierro o actitud evasiva
Ante una situación en la que la pareja plantea una queja o crítica, la actitud evasiva implica mostrar indiferencia: mirar hacia otro lado, hacer como que no se escucha, entretenerse con otra actividad… Actitudes dañinas que lo que hacen es potenciar aun más el conflicto en la pareja.
Estas conductas pueden estar presentes en algún momento de nuestra relación, pero cuando se vuelven permanentes, las probabilidades de ruptura aumentan.
Recordad que las relaciones de pareja requieren, ante todo, un trabajo constante.
Con cariño,
Mercedes