Solo respira
«Es como si tuvieras un frasco (tu cerebro), y lo llenas de agua y purpurina (tus pensamientos). Si agitas el tarro y la purpurina se mueve por todos lados, eso sería como está tu mente cuando te enfadas. Da vueltas y no tienes tiempo para pensar…»
Me parece genial esta metáfora utilizada por una niña para explicar cómo funcionamos cuando no somos capaces de controlar nuestras emociones.
La descubrí en este interesante vídeo creado por un matrimonio al ver a su hijo de 5 años contarle a un amigo cómo sus emociones afectaban a su cerebro (se volvía muy alterado, sin poder pensar claramente) y a su comportamiento (se alteraba hasta ponerse rojo de rabia y llegaba a golpear), y que tan «sólo respirando» profundamente, conseguía calmarse.
El matrimonio reconoce sorprendido: «El vídeo no tiene guión. Son los propios niños los que expresan su visión de las emociones y cómo afrontarlas a través de la respiración y la meditación».
En este fantástico caso, son ellos quienes nos enseñan algo a los adultos… y es que muchas veces se nos olvida la importancia de la inteligencia emocional y de destinar tiempo a desarrollarla.
¿Y vosotros, cómo conciliáis vuestras emociones cuando estáis tristes o enfadados?
Un cariñoso saludo,
Mercedes
Os dejo el enlace a este bonito vídeo y os animo a verlo y a compartirlo con vuestros hijos!: Solo respira
Desde hace algunos años tengo miedo al conducir. Conduzco a diario, pero me crea mucha tensión y ansiedad. Quiero saber si tratas este problema y la tarifa, tengo un seguro privado con DKV. Muchas gracias.
Comenta →Desde hace algunos años tengo miedo al conducir. Conduzco a diario, pero me crea mucha tensión y ansiedad. Quiero saber si tratas este problema y la tarifa, tengo un seguro privado con DKV. Muchas gracias.
Comenta →Contestación de Antonio Fernández
Hola Antonio!
Gracias por comentar. Claro que tiene tratamiento el miedo a conducir. Te escribo email privado con más información!
Saludos!
Mercedes
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